Zuquilanda promete que si gana vivirá solo de su pensión
Lunes, 6 de Febrero de 2017
El
candidato presidencial del PSP es fuerte crítico del Gobierno y propone una
‘tormenta’ en la Cancillería en caso de llegar al poder.
Patricio
Zuquilanda bromea y dice que ha gastado ya tres pares de zapatos en esta
campaña. Luego dice que no tiene plata para pagar encuestas y que por eso todas
las que se han hecho públicas le dan un porcentaje muy pequeño de intención de
voto.
Cuando
habla se toma su tiempo. Para responder a una pregunta puede remontarse 17 años
atrás o hasta explicar detalladamente una teoría política. Pero, cuando
más cómodo se siente es cuando habla sobre el servicio exterior. Como
diplomático, empezó abajo y terminó siendo Canciller de Lucio Gutiérrez. Por
eso dice que conoce el funcionamiento de la Cancillería “de la A a la Z”. Y una
de sus propuestas es, precisamente, provocar una especie de ‘tormenta’ dentro
de la institución, quitándoles a los diplomáticos dos de los roles que
tradicionalmente les han correspondido.
Zuquilanda
piensa que una vez que Gutiérrez fue destituido del poder, gran parte de la que
fue su “masa” electoral se volcó hacia Alianza PAIS. Pero ahora, siente él,
muchas de esas personas están volviendo a ver hacia Sociedad Patriótica y que
es eso lo que las encuestas no ven.
Da la
apariencia de que el PSP no tiene la misma fuerza de hace años. ¿Siente usted
eso?
¿Por
qué partidos poderosísimos como el MPD, la Democracia Cristiana, la Izquierda
Democrática, el Prian y el PRE, apoyados con dinero, de gente muy importante,
han desaparecido? ¿Por qué Sociedad Patriótica sigue ahí? La clave es que este
partido no lo dirige gente con chequeras, no se discuten las ideologías, sino
los temas nacionales: la pobreza, el hambre, la desnutrición. Además, las
personas tienen voz y voto. Entonces, la solidez de este partido es una especie
de compromiso personal de sus miembros.
Ustedes
promovían la unidad que nunca se dio y a usted le tocó inscribir su candidatura
a última hora. ¿Cómo tomaron eso?
Nosotros
fuimos los autores de la plataforma de la unidad. Dijimos que el pueblo estaba
pidiendo unidad. A mí me nombraron jefe negociador del partido y comenzaron las
reuniones con todas las fuerzas políticas. Lo hacíamos por mandato y porque
creíamos que esa era la verdad. Inclusive sugerimos el nombre de una persona que
nunca aceptaba. Todos decían: ‘este es el tipo que le va a ganar al partido de
Gobierno’.
¿Se
está refiriendo a Jaime Nebot?
Sí.
¿Y
qué le hace pensar que en esta elección podrán obtener un buen resultado?
¿Quién
era el voto fuerte de Sociedad Patriótica? El campesino, la gente más pobre.
Cuando nos derrocaron y el país entró en esa etapa de confusión política, mucha
gente de esa pasó a ser parte de la votación de Alianza PAIS. Entonces, ¿quién
es el que más le preocupa a Alianza PAIS? No le preocupa (Guillermo) Lasso ni
(Cynthia) Viteri, le preocupa Sociedad Patriótica, porque está recuperando de
una manera aceleradísima la votación de toda esa masa.
Sin
embargo, eso no se está reflejando en las encuestas.
¿Cuáles
encuestas?
Las
que se han hecho públicas.
¡Las
pagadas!
Las
que se han hecho públicas.
Mire,
yo autorizo que en este periódico salga publicado que yo sé que las encuestas
son pagadas. Tengo pruebas de que nos piden plata para ponernos más arriba. Por
eso rechazamos esas encuestas.
Revise
cuánto le daban a Lucio cuando ganó la Presidencia, cuánto le daban a Gilmar
cuando quedó en tercer lugar. Ni siquiera nos invitaban a los debates. Nosotros
no ponemos dinero para encuestas; donde sí estamos poniendo dinero y esfuerzo
es en el control electoral. Hemos probado que miles de personas muertas están
en el padrón.
¿Qué
resultado prevé usted en las elecciones, dado que no cree en encuestas y dice
que están creciendo?
Lo
que puedo asegurar categóricamente es que hay dos personas que no van a ganar
nunca: Lenín Moreno y Guillermo Lasso. Si hay limpieza electoral, ellos no van
a ganar nunca.
¿En
qué se basa para decir eso?
Porque
la gente nos dice: ‘hay que liquidar a estos tipos de la 35; y al banquero
también’.
El
correísmo ha instalado su gente en todas las instituciones, la función
judicial, la Contraloría, la Fiscalía… Cambiar eso le tomará mucho tiempo.
Nadie
va a defender lo actuado y va a haber una mayoría brutal de la oposición en la
Asamblea. Por lo tanto, los cambios van a ser inmediatos y radicales.
La
propia Asamblea se debe convertir en la reformadora, tiene que revertir los
nombramientos de todas estas personas. Esas reformas serán sometidas al pueblo
y el pueblo va a aprobarlas masivamente. Además, yo dije en Esmeraldas:
Patricio Zuquilanda, presidente de la República, renuncia a su salario, y esto
no es populismo.
¿Y de
qué va a vivir?
De mi
pensión, pues. Siempre he vivido de mi pensión. Además, en la Presidencia sí me
han de dar un plato de comida (risas). Yo tengo el entrenamiento asiático, el
costarricense. Siempre me llamó la atención ¿por qué el Presidente debe ir con
20 carros y 20 ambulancias atrás, y tiene que cerrar las calles para caminar?
¿por qué no puedo manejar yo? ¿y por qué los ministros deben tener
guardaespaldas? Hay 65.000 vehículos en la administración pública.
¡Impresionante! ¿A cuenta de qué? De los bolsillos de todos ustedes.
Usted
es experto en relaciones internacionales. Hay dos cosas que han generado debate
en redes: su deseo de tener una buena relación con Donald Trump y su intención
de exigir visa a muchos inmigrantes.
Quiero
una excelente relación con Donald Trump porque nosotros en Estados Unidos
tenemos miles de ecuatorianos indocumentados y este es el momento de mayor
peligro para esas personas. Primero, le pediré a Trump un acuerdo de protección
migratoria para todos ellos. Luego, plantearé un acuerdo comercial puntual con
Estados Unidos.
¿Y el
tema de las visas para entrar a Ecuador?
Nosotros
toda la vida teníamos visa. A los países que nos pedían visa, les pedíamos
visa. El espíritu integracionista es de la pureza. Si yo le mando bombas atómicas
o cocaína, ¿qué espíritu integracionista?, yo estoy defendiendo a mi país.
¿Renegociaría
usted la deuda con China?
A mí
me mandaron de la Cancillería todos los documentos de la negociación con los
chinos. ¿Sabe qué descubrí? Que nosotros tenemos una deuda con ellos
impresionante, pero ¿cuánta inversión real tenemos de los chinos aquí? ¡92
millones de dólares! 12.000 millones de deuda y 92 millones de inversión. Pero
no la renegociaría, la reestructuraría, renegociar es imposible; cualquiera que
diga eso hay que mandarle a la universidad. La deuda ha sido contratada a cinco
años plazo, con un interés de 10,75%.
Bueno,
decía que va a reestructurar la deuda…
De
hecho, ya tengo identificados cinco de los 10 negociadores que se van a necesitar
para hacerlo. Uno de ellos soy yo. A China hay que decirle: ‘Mire, los cinco
años se convierten en 20 años, más 10 de gracia. Y este 10,75% se debe
convertir en 2 o 3%, que es lo que usted le cobra a los países comunistas del
área.
¿Y si
le dicen que no?
No
pagamos, pues.
¿Default?
No,
no. Es que yo tengo experiencia. No crea que voy a plantear esta cosa vis a
vis, esto yo lo llevo a las Naciones Unidas para negociar ahí, para que se
exponga nuestro caso ante el mundo. A ningún país le están cobrando esos
intereses, solo a Ecuador. Ya me sé de memoria esto. ¿Si yo tengo que pagar 3%
y pago 10,75%, qué es lo que está pasando en medio del camino?
¿Qué
opina de la Ley de Comunicación y del concurso de frecuencias?
La
Ley de Comunicación es un error ideológico del partido de Gobierno. Se ve
claramente que es para favorecer prebendas y para favorecer, oscuramente,
alguna cosa de corrupción. Yo he leído esa Ley y no le veo otra razón. En medio
de toda esa filosofía política que tiene, el único objetivo es callar a la
opinión pública y que no pueda investigar. ¿A través de qué investiga la
opinión pública? No investiga, pues, el señor que vende pasteles en la esquina,
sino a través de los periodistas, de los medios. Entonces, yo tengo la fórmula.
¿Cuál
es?
Esa
Ley se tiene que explosionarle, no se debe eliminar. Hay que mantener el
concepto de la réplica; los griegos ya manejaban el concepto de la réplica
porque tenía que ver con la nobleza intelectual.
Pero
eso ha existido siempre y está consagrado en la Constitución. No se necesita de
ninguna Ley.
Exacto,
pero hay que conservar el concepto, cuando es aplicado con nobleza. Si usted
tiene una tesis y yo tengo otra, la exposición de ambas, ese debate se encamina
hacia el conocimiento de la verdad. Además yo estoy proponiendo que haya un
representante de los medios en los gabinetes ministeriales. ¿Qué tenemos que
esconder? ¿La bomba atómica? Lo que se esconde es la mugre, pero cuando un
Gobierno no tiene nada que esconder, todo ciudadano tiene derecho a saber con
qué se compraron las pistolas de la Policía, o los carros del Ejército, o lo
que sea. Ponemos cámaras de televisión, los representantes de los medios ahí en
los gabinetes, en los ministerios. ¿Por qué solo los asambleístas pueden pedir
información? Siempre me he preguntado eso…
¿Y
sobre el concurso de frecuencias?
Realmente
desconozco cómo se hizo. Por dármela de electorero, podría decir: ‘yo
desconozco ese concurso’, pero yo no soy electorero. Lo que sí he visto son las
consecuencias.
¿Cuáles son?
Que a muchas radios y televisoras locales que le
daban espacio a Sociedad Patriótica, se les ha quitado la frecuencia en ese
concurso. Entonces, se ha hecho ‘a dedo’, desde mi punto de vista. Todo lo que
es impuro tiene que corregirse, porque una sociedad que se respeta tiene que
volver a revisar ese tipo de cosas. Yo sé que el señor Diego Oquendo, de radio
Visión, no es hincha de Sociedad Patriótica, pero me parece un gran periodista,
un hombre respetable. Lo mismo con radio Democracia y todas las demás radios.
Siempre me he preguntado ¿por qué tiene que haber límite de frecuencias? ¿por
qué no puede haber un millón de radios? He preguntado eso técnicamente y nadie
me ha sabido contestar.
Usted
conoce bien el funcionamiento de la Cancillería. ¿Hay exceso de personal?
¿Sacaría
gente de ahí y cómo nombraría al personal?
Agradezco
esa pregunta, porque la Cancillería va a arder después de lo que voy a decir.
Yo soy una de las víctimas de una Cancillería tradicional, donde,
efectivamente, el 20% trabaja y el 80% son ‘buena vida’; solamente que eso está
ahora exacerbado. Nosotros teníamos 522 funcionarios en todo el servicio
exterior y para nosotros era más que suficiente. ¿Cómo es que ahora la
Cancillería tiene 2.800 funcionarios, consulados con 80 funcionarios? Claro,
cuando va alguien del Gobierno salen con sus familias y con banderas. Ahí se
gasta un montón de plata, es un gasto feroz.
¿Y qué plantea?
Mire,
¿qué es lo que me dice la experiencia? Las oficinas comerciales son dirigidas
por burócratas, generalmente de Quito o Guayaquil, que nunca han conocido una
bananera, una cacaotera, un cafetal, un camarón… Yo voy a decidir que las
oficinas comerciales sean dirigidas por los productores y los exportadores. Por
otro lado, ¿qué pasa en las oficinas consulares? También mandan a gente de
Quito o Guayaquil, llegan a la 5ta Avenida y no saben dónde están, llegan a
España y no saben dónde es Alcalá… No saben ni el idioma, ni cómo
desenvolverse, se demoran tres años en aprender y cuando aprenden, ya los traen
de vuelta. ¿Qué voy a hacer? Para estas oficinas consulares tenemos miles de
emigrantes que se ‘la han jugado’ allá. Ellos tienen relaciones con los alcaldes,
con los gobernadores… Saben las necesidades de los ecuatorianos en esas
localidades.
¿Y para qué quedan los diplomáticos? ¿No es todo eso
mermar la carrera exterior?
Claro
que es mermar. Mermar y mejorarle. Estos señores, que son los ‘buena vida’, han
demostrado que gastan bastante. Mire, vamos a suponer que todos estos señores
ganan 10 millones de dólares, deberían producir 100 millones para el país.
¿Producen dinero en esa relación o son puros gastos? Hay que darles una lista
de objetivos: en Colombia, por ejemplo, necesitamos equilibrar la balanza de
pagos vendiéndoles arroz, atún y sardina.
Frases
"¿Quién era el voto fuerte de Sociedad Patriótica? El campesino, la gente más pobre. Cuando nos derrocaron, mucha gente de esa pasó a ser parte de la votación de PAIS”.
"Tengo pruebas de que nos piden plata para ponernos más arriba. Por eso rechazamos esas encuestas”.
"Hay dos personas que no van a ganar nunca: Lenín Moreno y Guillermo Lasso”.
"Quiero una excelente relación con Trump porque nosotros en Estados Unidos tenemos miles de ecuatorianos indocumentados”.
"La Ley de Comunicación es un error ideológico del partido de Gobierno. Se ve claramente que es para, oscuramente, alguna cosa de corrupción”.
Texto y foto tomados de La Hora
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